Todo comenzó y termino con un accidente. Romanovich cerro los ojos unos segundos. Tres días sin dormir y una resaca intensa de drogas tuvieron la culpa. Un breve instante de debilidad que a punto estuvo de costarnos la vida el primer día que llegamos a Sudáfrica. Echaba en falta un cepillo de dientes. Me esforcé …