La madrugada del jueves día 5 de diciembre de dos mil trece, a los pocos minutos de volver de fiesta, salí literalmente huyendo de Gondar aunque apenas había dormido. Cogí un bus con dirección a Gashena, cruce caminos en el que debes apearte camino a Lalibela. El lugar no dejaba de ser un estercolero de miseria …